Aumenta el riesgo de plagas tras el paso de Filomena
El inicio de este año no ha dado tregua a gran parte de España y, esta vez, el temporal de nieve y las bajas temperaturas han azotado muchas comunidades del país, entre las que destacan Madrid y Castilla-La Mancha.
Y es que, aunque parezca que los inconvenientes comienzan a mermar tras la marcha de la borrasca Filomena, las consecuencias que ha dejado continúan afectando a varias zonas del país. Uno de los puntos más relevantes es el que señala ANECPLA (Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental): el riesgo de proliferación de diversas plagas.
¿Cuáles son los factores que favorecen el desarrollo de plagas?
El paso de Filomena ha generado una acumulación de nieve pocas veces vista (incluso a niveles históricos en algunas zonas). Esta acumulación y su posterior deshielo, sumada a las lluvias que se esperan estos días, puede dar lugar a un aumento del caudal en los sumideros que, junto al bloqueo por restos de ramas, arbustos y basuras, podría llegar a colapsar el sistema de alcantarillado.
A esta situación, además, se le suma la acumulación excesiva de residuos ante la imposibilidad, durante días, de que camiones de basura y equipos de limpieza circularan con normalidad por ciertas zonas.
Estas dos situaciones han creado las condiciones ideales para una proliferación de plagas de ratas o cucarachas, entre otras. Y es que las plagas ven en la humedad generada por la nieve y la lluvia, en esconderse en sitios inhóspitos y en alimentarse de restos de basura y desperdicios sus grandes aliados, lo que puede llegar a suponer un grave riesgo para la salud pública por la facilidad con la que trasmiten enfermedades como la salmonelosis, disentería o leptospirosis.
¿Cómo evitar la proliferación de plagas?
En la medida de lo posible, es importante evitar acumular desperdicios y residuos que empeoren la situación. Para eso sería de gran ayuda evitar sacar la basura tan a menudo como acostumbramos, al menos hasta que los servicios de limpieza vuelvan a la normalidad.
Otra solución es despejar todo lo posible aquellas zonas que puedan estar obstaculizando el correcto drenaje del deshielo y las lluvias, ya sea vegetación o restos de ramas y arbustos.
Y por supuesto, ante el mínimo indicio de actividad de cualquier insecto o roedor, es imprescindible acabar con el problema de raíz a través de los servicios que pueden brindar empresas especializadas en el control de plagas, como EZSA Sanidad Ambiental.